Veo el blog y me doy cuenta que tiene más de un mes desde la última vez que escribí algo. Estoy terriblemente apenado con mis lectores (dos).
Han pasado muchas cosas desde esa última entrada. A veces pienso que esa es la razón por la que abandoné el blog: muchas cosas que esperaba que ocurrieran después (mucho después) pasaron antes y mi atención se centró en esos temas, en atenderlos.
Aunque pienso que esa explicación es perfectamente inválida y ridícula y la verdad es que no tengo ningún argumento contundente para justificar el desamparo en que dejé a mi bienamado blog por más de un mes, por lo que ahora me propongo no volver a dejarlo tan vulnerable y desvalido como estuvo durante todo el mes de noviembre y la primera semana de diciembre.
Para empezar, quisiera actualizar a mis lectores en un tema que ocupó mucho espacio en las entradas anteriores y ese es mi participación en una carrera de 10 kilómetros.
Me da mucho gusto anunciar que no sólo participé en una carrera de 10K sino en tres. Desde el 12 de noviembre y hasta el 26 corrí cada fin de semana y en cada carrera tuve un mejor desempeño que en la anterior, dejando mi récord oficial en competencia en 46 minutos y 25 segundos, por lo que me siento muy satisfecho.
Correr y competir ha sido una experiencia muy satisfactoria. Me gusta la sensación de logro, de cumplir con el objetivo propuesto. Me estimula y me da confianza. Mejora mi autoestima, me siento mejor conmigo mismo y pienso que si me propongo algo, si trabajo con dedicación, con disciplina, con pasión y que si todo lo que hago para alcanzar mi meta se lo dedico a Dios, tendré éxito.
Ahora sigo entrenando y mi próxima carrera es el 31 de diciembre y espero poder correr los 10 kilómetros en 45 minutos.
En lo que toca al francés, hoy concluyó oficialmente el curso con la aplicación del examen final y extraoficialmente mañana habrá una actividad de clausura de clases. Haremos une pièce théâtral: Les trois petits cochons.
Creo que mi mal ganada fama de racista se diluyó con el paso de las semanas y porque evité cualquier comentario que pudiera malinterpretarse. Al final, disfruté mucho el curso, la exposición de la profesora y el entusiasmo de mis compañeros. Estoy muy satisfecho también por concluir el segundo nivel de francés.
Otro tema importante es, por supuesto, mi cumpleaños. También me da gusto darme cuenta que justo decido recuperar mi hábito de escribir este blog un día antes de mi cumpleaños.
El cumpleaños de uno siempre es una buena oportunidad para reflexionar, para pensar dónde está uno y dónde está la vida de uno (pasa muy seguido que las dos cosas están en lugares diferentes y ese estado no es el ideal). Mi vida se presenta diferente cada año pero creo que esta vez estoy mejor (way better!) que el año pasado. En general, estoy bien. Estoy contento. Llevo cuatro meses sin fumar, mi salud está mejor, las cosas en casa marchan trabajosamente pero todo estamos juntos y felices, el trabajo no se mete mucho conmigo y yo no me meto mucho con él y los primeros meses del próximo año son importantísimos para mí y para todos los que quiero.
Finalmente, quisiera enviarle esta entrada a mi novia, a la mujer que amo y que me recordó que tengo un blog que mantener y que además cuenta con el rarísimo privilegio de ser uno de mis dos lectores. B, gracias por tu aliento y tu abrazo. Te amo.
Han pasado muchas cosas desde esa última entrada. A veces pienso que esa es la razón por la que abandoné el blog: muchas cosas que esperaba que ocurrieran después (mucho después) pasaron antes y mi atención se centró en esos temas, en atenderlos.
Aunque pienso que esa explicación es perfectamente inválida y ridícula y la verdad es que no tengo ningún argumento contundente para justificar el desamparo en que dejé a mi bienamado blog por más de un mes, por lo que ahora me propongo no volver a dejarlo tan vulnerable y desvalido como estuvo durante todo el mes de noviembre y la primera semana de diciembre.
Para empezar, quisiera actualizar a mis lectores en un tema que ocupó mucho espacio en las entradas anteriores y ese es mi participación en una carrera de 10 kilómetros.
Me da mucho gusto anunciar que no sólo participé en una carrera de 10K sino en tres. Desde el 12 de noviembre y hasta el 26 corrí cada fin de semana y en cada carrera tuve un mejor desempeño que en la anterior, dejando mi récord oficial en competencia en 46 minutos y 25 segundos, por lo que me siento muy satisfecho.
Correr y competir ha sido una experiencia muy satisfactoria. Me gusta la sensación de logro, de cumplir con el objetivo propuesto. Me estimula y me da confianza. Mejora mi autoestima, me siento mejor conmigo mismo y pienso que si me propongo algo, si trabajo con dedicación, con disciplina, con pasión y que si todo lo que hago para alcanzar mi meta se lo dedico a Dios, tendré éxito.
Ahora sigo entrenando y mi próxima carrera es el 31 de diciembre y espero poder correr los 10 kilómetros en 45 minutos.
En lo que toca al francés, hoy concluyó oficialmente el curso con la aplicación del examen final y extraoficialmente mañana habrá una actividad de clausura de clases. Haremos une pièce théâtral: Les trois petits cochons.
Creo que mi mal ganada fama de racista se diluyó con el paso de las semanas y porque evité cualquier comentario que pudiera malinterpretarse. Al final, disfruté mucho el curso, la exposición de la profesora y el entusiasmo de mis compañeros. Estoy muy satisfecho también por concluir el segundo nivel de francés.
Otro tema importante es, por supuesto, mi cumpleaños. También me da gusto darme cuenta que justo decido recuperar mi hábito de escribir este blog un día antes de mi cumpleaños.
El cumpleaños de uno siempre es una buena oportunidad para reflexionar, para pensar dónde está uno y dónde está la vida de uno (pasa muy seguido que las dos cosas están en lugares diferentes y ese estado no es el ideal). Mi vida se presenta diferente cada año pero creo que esta vez estoy mejor (way better!) que el año pasado. En general, estoy bien. Estoy contento. Llevo cuatro meses sin fumar, mi salud está mejor, las cosas en casa marchan trabajosamente pero todo estamos juntos y felices, el trabajo no se mete mucho conmigo y yo no me meto mucho con él y los primeros meses del próximo año son importantísimos para mí y para todos los que quiero.
Finalmente, quisiera enviarle esta entrada a mi novia, a la mujer que amo y que me recordó que tengo un blog que mantener y que además cuenta con el rarísimo privilegio de ser uno de mis dos lectores. B, gracias por tu aliento y tu abrazo. Te amo.
1 comentario:
be! Es un gusto que regreses con tús historias!!! Siempre es lindo.
Besines. yuye
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